Siempre que los ejecutivos de una empresa nos aseguran tener proyectos de innovación muy robusto y completo; lo primero que les pedimos es que nos muestren las métricas de innovación.
La respuesta, en el 99% de las veces, es un rotundo silencio. Esto confirma que en América Latina existe un gran desconocimiento sobre cómo medir los proyectos de innovación.
De hecho; cuando hicimos la encuesta para este artículo de cuáles eran los temas que generaban más interés entre la gente; el que salió favorecido por aplastante mayoría fue, justamente, cómo medir la innovación en una empresa.
Reflexionando con el resultado concluimos que la innovación sigue siendo un tema confuso, intangible, casi rozando lo esotérico y pareciera que la necesidad de la gente se puede resumir en…
“Dígame cómo puedo tocar la innovación, dígame cómo la puedo medir”
Ya hemos dicho que si la innovación no hace sonar la caja registradora para una empresa con fines de lucro; significa que no está innovando. Por eso resulta imprescindible definir métricas que permitan evaluar si los esfuerzos de; los proyectos de innovación; van por buen camino y están produciendo resultados tangibles.
Un refrán popular en el mundo de la administración dice así: “lo que no se mide, no se puede mejorar”. La innovación debe gestionarse al igual que se gestionan los recursos humanos, las finanzas o las ventas.
Por eso hay una necesidad latente de medirla, de identificar cuáles son las ideas que están dejando más ganancias a la organización; y de evaluar el avance en la creación de una cultura de innovación, entre otras cosas.
Gracias a las métricas le podemos demostrar a la alta gerencia que los recursos de tiempo y dinero; invertidos en el proceso de innovación; realmente contribuyen al crecimiento, la ventaja competitiva y la rentabilidad de la empresa.
Sirven, además, para despertar un sentido de urgencia y crear compromiso en la organización. Si empleamos métricas adecuadas, el mensaje que se envía a la compañía es que la innovación es un proceso relevante, que genera un retorno indiscutible sobre la inversión.
Métricas de entrada y salida
Para medir de forma balanceada los esfuerzos que está realizando su empresa en innovación se recomienda utilizar métricas de entrada, de proceso y de salida. A continuación profundizaremos en cada tipo.
Métricas de entrada
Las métricas de entrada representan indicadores de esfuerzo o de insumos que alimentan al proceso de innovación.
Si definimos únicamente métricas de salida; puede que el proceso de innovación demore mucho tiempo en generar resultados tangibles que se vean reflejados en ellas. Es conveniente tener métricas que indiquen los recursos y esfuerzos que le estamos dedicando a los proyectos de innovación.
Las métricas de entrada aseguran que exista tiempo y recursos para que la gente pueda dedicar a actividades relacionadas con la innovación.
En muchas compañías el único recurso verdaderamente escaso no es el dinero sino el tiempo; pues las actividades del día a día atrapan al personal. Garantizar que la gente emplee una porción sustancial de su tiempo en innovación ayuda a que los esfuerzos de innovación progresen.
las siguientes métricas de entrada han resultado muy útiles para cuantificar el progreso de los esfuerzos de innovación
- Número de trabajadores capacitados en innovación y creatividad.
- Tiempo invertido de los directores en actividades de innovación.
- Estudios de mercado realizados para entender las necesidades insatisfechas de los clientes.
- Clientes entrevistados al año para entender sus necesidades.
- Ideas por colaborador de la empresa por año.
- Campañas masivas de ideas realizadas por año.
- Fuentes utilizadas para descubrir oportunidades de innovación.
- Prototipos o experimentos realizados.
- Recursos financieros dedicados a la innovación.
- Patentes registradas.
- Número de redes de las que forma parte la empresa para identificar las oportunidades de innovación.
No olvide que siempre es más fácil hablar sobre métricas que implementarlas. Por ejemplo; “número de ideas organizadas” pareciera un factor fácil de medir. No obstante, si su organización conduce demasiadas sesiones de generación de ideas; podría encontrar dificultad para llevar un registro apropiado de las ideas que se generan.
Entonces, si escoge un indicador determinado; asegúrese de saber cómo y cuándo va a recolectar la información.