Es muy común en la actualidad que las empresas no lleguen a cumplir sus metas por el estrés organizacional, quizá este termino no esté muy familiarizado contigo o con tu negocio, pero por ese motivo aquí te dejo los síntomas de una empresa que se encuentra en ese etapa.
Ausentismo laboral físico y emocional
La profunda desmotivación laboral estimula la búsqueda de cualquier pretexto para evitar ir a laborar. El incremento del ausentismo laboral, independientemente de la justificación que se tenga, es una señal de rechazo al ambiente laboral.
Existe una emoción frecuente la de “no querer ir a trabajar”, que aunque es frecuente y puede estar relacionada con aspectos personales del trabajador, cuando es generalizada, nos está indicando un problema más profundo que se origina en la organización.
Ese desagrado por ir a trabajar termina afectando a la organización en su productividad. El ausentismo emocional es un síntoma de fuga, mientras la persona aparentemente está presente trabajando físicamente, su atención real está fuera del trabajo, se fuga emocionalmente porque le desagrada lo que hace.
Cuando el desenfoque es generalizado las personas están pero no están presentes al 100% en lo que hacen porque su verdadero interés está fuera de lo laboral.
Bajas laborales por estrés
Normalmente camufladas por enfermedades gástricas, insomnio, gripes de temporada, migrañas, úlceras, etc… El cuerpo humano no es ajeno al entorno laboral y expresará la tensión que acumula de alguna forma.
La organización finalmente termina perdiendo cuando el estrés empieza a causar estragos en la salud de los trabajadores, existen síntomas extremos como la locura o incluso la internación hospitalaria.
Si en su organización han existido casos así, necesita revisar urgentemente su forma de operar.
Alta rotación o rotación por encima de la media.
¿Cuánto tiempo tarda una persona en aprender a desarrollar su puesto en su organización? –La experiencia tiene mucho valor, sobretodo en organizaciones complejas con curvas de aprendizaje extensas.
¿Se imagina perder a su personal capacitado de forma constante y continua y tener que recontratar sabiendo que poco tiempo después sucederá lo mismo y así indefinidamente?, ¿Cuánto está perdiendo su organización por este motivo?
Puede incluso que usted esté capacitando buenos elementos para su propia competencia.
Fatiga física y cansancio generalizado
El cansancio es un síntoma normal después de haber trabajado con pasión y entrega pero cuando el cansancio nunca se va, cuando el sueño reparador apenas lo elimina y empieza a instalarse en el cuerpo como un síntoma crónico, ya no estamos ante un cansancio normal, es un síntoma más profundo de estrés personal.
La calidad de vida queda profundamente impactada por este síntoma porque ya no hay energía disponible para nada más en la vida, más que trabajar y trabajar.
No hay energía para divertirse, hacer otras actividades, pasar tiempo de calidad con la familia, etc. Se impacta en la calidad de la vida sexual, no hay energía para ser una persona equilibrada en pocas palabras porque el trabajo se lo lleva “todo”.
Exceso de fines de semana o periodos de vacaciones con trabajo.
Cuando los excesos en el consumo del tiempo personal de los trabajadores van más allá de la excepción, definitivamente la empresa está afectando la vida personal de sus empleados e incluso muchas empresas ni siquiera reconocen como tiempo extra este tipo de esfuerzos adicionales por lo que la inconformidad no declarada ya queda sembrada y más pronto que tarde afectará en la relación laboral.
Cuando la empresa no compensa adecuadamente el esfuerzo del trabajador entonces el trabajador se lo cobrará de otras formas; ausencias, baja productividad, incumplimientos horarios, etc.
Continuaremos en nuestro próximo artículo…