Para conocer un poco el concepto branding lo puedo resumir como la gestión o administración de las marcas.
Cualquier negocio o empresa tiene una marca, lo cuestionable aquí si es una buena marca y qué aporta a la estrategia del negocio. No importa el tamaño de tu empresa o el tipo de negocio que tengas, ten por seguro que eres una marca y si no la administras correctamente tendrás problemas.
Uno de los problemas principales son los recursos que se asignan para la administración de la marca (branding) y aquí es donde se puede formular la siguiente pregunta…
¿Qué hace que no se destinen los recursos y los medios necesarios en una estrategia de branding?
La respuesta es compleja, hay muchos factores que influyen, algunos mencionados por empresarios producto de investigaciones, pláticas y convivencia con diferentes dueños de empresas de diferentes sectores.
Algunos de los más relevantes menciono a continuación:
La carencia de conocimiento profundo acerca de las fuentes de creación de valor de marca.
Existe mucha confusión al respecto, en muchos casos se tiende a creer que la principal fuente de creación de valor de marca viene de la mano de la publicidad y la comunicación. Es un error, hay muchas vías de creación de valor de marca distintas y muchos ejemplos de grandes marcas (algunas de las más importantes del mundo) que no han tenido cuanto apenas presupuesto de publicidad y comunicación.
Ahora bien, es cierto que bien enfocada la publicidad es un potente motor de creación de valor de marca.
Falta de conocimientos de branding dentro de la empresa.
Son, en muchos casos, empresas dotadas de pequeños departamentos de marketing o incluso sin los mismos, tienden a pensar que el branding es “para los demás, para los grandes”, creo que hay que cambiar esta creencia, hay que desenterrar la falacia de que las pymes no hacen marketing, claro que lo hacen, si bien en muchos casos más por instinto comercial y por necesidad de mercado que de un modo estructurado.
Por tanto, sería importante que los gerentes de las empresas tuvieran sólidos conocimientos de branding, a nivel estratégico, de modo que pudieran maximizar dentro de sus estrategias la creación de valor de sus marcas, y a partir de ahí extender en toda la empresa la cultura de construcción de marca.
Esto es lo que históricamente han hecho pequeños empresarios que han construido grandes marcas, seguramente no sabían que aplicaban los principios del branding, pero lo hacían excelentemente.
Hay conciencia del valor de la marca como fuente de éxito de empresarial y diferenciación competitiva, de lo que se trata es de poner en marcha, primero el conocimiento dentro de las empresas y después las estrategias de branding que permitan a nuestras empresas construir marcas poderosas y valiosas.