¿Qué hace falta para triunfar en el siglo XXI?
Como te comentaba en nuestro artículo anterior, la respuesta a esta pregunta no está del todo clara, pero es de suponer que las compañías que han sido exitosas en el pasado serán las de mayor posibilidad de tenerlo en el próximo siglo – el punto de partida para predecir el futuro es analizar el pasado.
Continuamos con los elementos 3 y 4 que toda empresa debe de tomar en cuenta para triunfar:
Elemento # 3 – Tener acceso y servir a mercados globales y así lograr triunfar
Para una compañía especializada e innovadora, la manera más fácil y rápida de crecer es abrirse a nuevos mercados geográficos. Las compañías exitosas del siglo 21 aumentan sus ingresos concentrándose en mercados internacionales más que en los nacionales.
Los beneficios del mercadeo global son:
– Es un seguro contra los reveses que todas las economías nacionales enfrentan de tiempo en tiempo. Al ingresar a mercados internacionales, se reduce el riesgo.
– Las marcas internacionales pueden valorizarse muy por encima de las marcas nacionales. – Si las compañías no se expanden hacia el mercado global, es posible que sus competidores de otros países se expandan hacia los mercados de las primeras.
– Pasar de un mercado nacional al mercado internacional genera un crecimiento sustancial.
El paso hacia la economía global avanza rápidamente, la mayoría de las industrias está teniendo una naturaleza internacional debido a la disponibilidad de información más precisa, las compañías que no logren ajustarse a este enfoque comercial quedarán a la zaga.
Elemento # 4 – Ser flexible, prepararse para sortear cualquier obstáculo para llegar al éxito
El crecimiento comercial rara vez ocurre de manera ininterrumpida. Las mejores compañías aprenden a sortear los desastres y se hacen creativas al responder a potenciales problemas, específicamente:
– Poseen una destreza extraordinaria para sacar provecho aún de las peores situaciones. Cometen errores todo el tiempo, pero se aseguran de aprender de ellos. Son sobrevivientes.
– Siempre están dispuestas a soportar un poco de sufrimiento a corto plazo a cambio de beneficio a largo plazo.
– Son capaces de renunciar a atractivas oportunidades comerciales en áreas que están fuera de la especialidad de su negocio.
– Poseen un alto grado de flexibilidad – son capaces de hacer re estructuraciones y despedir personal si es necesario.
Las empresas que logran triunfar se preparan para los inevitables malos tiempos, navegan a través de los retos con aplomo y avanzan con confianza.
¿Está muy lejos tu empresa de ser una empresa triunfadora?
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Jorge Luis Adrián
Contador General |Domustik
